Tantra
Nueva Tierra
Preguntas y Respuestas
Sobre las emociones y su gestión en la mujer
Consulta: Mi
nombre es Fabiola. Nací hace 34 años en Barcelona.
Siento la riqueza de lo espiritual desde que me recuerdo muy pequeña.
También siento la riqueza de la sexualidad mística desde siempre que yo recuerdo
la sexualidad.
Mi acercamiento "formal" al tantra se está produciendo desde hace unos 2 años, a
través de haber conectado con un grupo de desarrollo espiritual originario de
Siberia.
A pesar de ello, siento en estos momentos dificultad para saltar del
entendimiento mental a la vivencia en cuanto a conectar con mi esencia femenina,
con la fluctuabilidad de las emociones, sin sentirme débil o prisionera de esas
fluctuaciones. Sin sentir vergüenza. Entiendo que ello es como la esencia del
tantra, algo necesario y que no puede ser substituido por respiraciones, asanas
u otras prácticas conscientes.
¿Me recomiendas algo que pueda ser concretable para mi?
Namaste
Fabiola.
R:
Estimada Fabiola, gracias por tu mensaje.
El Tantra es conectar con "el Ser". El Ser es el Espíritu que realmente somos y
que normalmente está lejos de nuestra experiencia aquí en la dimensión de
nuestro yo material. Conectar con el Ser, traer la experiencia del Ser aquí a tu
yo terrenal, como el Tantra propone, es otra dimensión. Es unir la tierra y el
cielo, llevar la consciencia del Espíritu a la materia. Y eso está más allá del
yo emocional, del ego.
El ego es el "personaje" (Fabiola, Jesús, Juan...) que no es más que una
creación del plano mental-emocional, la mente programada de matrix. El Tantra no
rechaza lo emocional. El Tantra no rechaza nada, sino que propone vivirlo
plenamente con consciencia para transcenderlo.
La mente emocional es algo que debemos ya dejar atrás. Es un residuo del pasado
que nos ha esclavizado durante milenios. Sólo hay una emoción verdadera y esa es
la emoción de Dios, del Espíritu en ti, el entusiasmo, como decían los griegos
(en-zeus-iasmo). La emoción de aquel que está imbuido de Zeus, el Espíritu.
Dejar atrás la mente emocional es un gran trabajo de sanación. Es un trabajo de
soltar tu pasado, de sanar la relación del "niño" con papá y mamá. Cortar esos
hilos que nos atan, aunque tengamos 34 años y que nos mantienen en la reacción
con el mundo que nos rodea, con las relaciones que tenemos, que nos impiden
estar en nuestro centro (en el Ser). Dejar atrás la mente emocional es un gran
trabajo de elevación de nuestra consciencia, de comenzar a ser conscientes de
nuestros pensamientos automáticos y de nuestras reacciones emocionales, para
poder elegir de nuevo. La consciencia del Ser es eso precisamente, una elección:
¿quién elijes que eres en cada momento, el personaje mental-emocional, o la paz
y la dicha del Ser que realmente eres, del Espíritu en ti?. TU SIEMPRE ELIGES,
aunque parezca mentira desde ese yo automático y mundialmente reconocido como lo
que debe ser una persona. Pero por muy aceptado que esté en nuestro mundo que
ese yo es como debe ser, es mentira. Tu siempre tienes poder de elección frente
a tus pensamientos y tus emociones. Siempre tienes el poder de elegir en el
instante del ahora, la dicha o el dolor, el cielo o el infierno en ti.
Las mujeres tenéis un gran poder, pues la energía de la diosa se expresa a
través vuestro de manera natural. Pero la mujer debe sanarse para que esto sea
realmente así y no quede en un mero reflejo, mas o menos hermoso a veces, mas o
menos desequilibrado otras.
La mujer debe abrazar sus heridas internas, aprender a verlas y a curarlas para
conectar con su verdadero poder. Tomar consciencia es el camino. ¿Qué se mueve
del pasado dentro de ti, cuando tus emociones fluctúan y te sacan de tu centro?.
Nos han enseñado que es algo normal en la mujer y que es una cuestión de
hormonas. Que cuando una mujer tiene la regla, por ejemplo, las hormonas y los
procesos del cuerpo la hacen sentirse mal. Todo eso es falso. Lo que ocurre es
que en esos momentos en la mujer se despierta una sensibilidad especial ligada a
la energía de la luna, que hace notar más sensiblemente lo que había enterrado
en el interior. Digamos que el cuerpo emocional se despierta especialmente, y el
cuerpo emocional no es en la mayoría de los casos el "cuerpo de dicha
emocional", sino el "cuerpo dolor emocional". Eso es lo que ocurre, lo cuál no
deja de ser una oportunidad para verlo. Los hombres lo tienen normalmente más
difícil, pues qué lejos suele estar ese "macho", de sus emociones internas. Ya
se encarga él de que ni aparezcan. O ni siquiera sabe que existen a veces. Pero
ahí están de igual forma, estallando contra el mundo en el momento más
inesperado.
Así que querida Fabiola, ese es el panorama. El Tantra Yoga es un gran camino de
sanación y de iluminación. Si no no es Tantra. Eso si, un maravilloso camino que
nos enseña a disfrutar del mundo, de nuestra sexualidad, de nuestras emociones,
mientras lo vamos dejando atrás....
El Tantra no enseña (aunque también lo enseña) sexualidad mágica. El Tantra
enseña a dejar de ser tu. Cuando Fabiola se ha retirado, la Diosa aparece a
través de Fabiola.
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