Escuchar en voz Lección 328 Lo que parece
ser el segundo lugar es en realidad el primero, pues percibimos todo al
revés hasta que decidimos escuchar la Voz que habla por Dios. Nos parece
que sólo podemos alcanzar autonomía si nos esforzamos por estar
separados, y que la manera de salvarnos es aislándonos del resto de la
creación de Dios. No obstante, lo único que podemos derivar de ello es
enfermedades, sufrimientos, pérdidas y muerte. Esto no es lo que nuestro
Padre dispone para nosotros, y no existe otra voluntad que la Suya.
Unirnos a Su Voluntad es encontrar la nuestra. Y, puesto que nuestra
voluntad es la Suya, es a Él a Quien debemos acudir para reconocer
nuestra voluntad. |
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