CARTA A LOS MAESTROS DE LA LUZ -
Comando Ashtar a través
de
Keshavananda.
Queridos maestros de la luz,
Todos estos cientos y miles de personas interconectadas
en estos grupos de facebook, de twitter o de tantas
otras redes similares a lo ancho de todo el planeta,
configuran el cuerpo de los "trabajadores de la luz", o
los maestros de la luz, aquellos seres que han comenzado
a despertar su compromiso con el Espíritu aquí en la
Tierra. Ya hemos comentado en escritos anteriores, como
realmente todos los seres en el Universo son
trabajadores de la luz, pues la Luz es el Espíritu, lo
único Real. Cuando hablamos y nos dirigimos a los
"trabajadores de la luz" o a los maestros, simplemente
nos referimos a aquellos seres que han comenzado a
"recordar". Los demás seres "dormidos" también son Dios,
pero no han comenzado todavía ni a recordarlo.
Enfatizamos el término "comenzado", pues la mayoría de
lo que llamamos trabajadores de la luz, la mayoría de
los maestros de nuestro mundo actual, simplemente "han
comenzado" a recordar.
Queda todavía un camino a recorrer para que ese
"comenzar", se convierta en verdadera Presencia
Crística. Y ese camino es el que ahora, tras el
Solsticio del 21-12-2012, y el comienzo de ese nuevo
ciclo galáctico de luz que comenzó (o mejor dicho, que
alcanzó su punto culminante) en la alineación con el
Sol-Cristos central de nuestra Galaxia (Hunab-Kú, le
llamaban los Mayas) del 21 de Diciembre del 2012, ese
camino es que se nos pide ahora recorrer rápida y
gloriosamente, pues a partir del equinoccio del 20 de
marzo de este 2013 ya no habrá tiempo y entraremos de
lleno en un ciclo acelerado de manifestación de una
nueva y cada vez más desconocida realidad de 4ª-5ª
dimensión, donde muchos hermanos de nuestro planeta van
a necesitar ayuda. Ayuda de seres realmente conectados
con su Ser Crístico, seres que hayan dejado ya atrás su
"yo personalista", seres que hayan transcendido ese "yo"
en el que la humanidad ha vivido por miles de años.
¿Y qué quiere decir "dejar atrás" ese yo
personalista?. Permítanme darles alguna líneas:
-
Un Ser
Crístico no tiene "deseos personales". No va en
busca de ellos, no se guía por ellos, ni se los
exige a los demás. Un Ser Crístico ha
curado-sanado-liberado su yo emocional y ya no lo
proyecta en el mundo.
-
Un Ser
Crístico se ha hecho maestro consciente de sus
pensamientos-emociones. Ya no se puede permitir
proyectarlos impunemente sobre el mundo y los demás,
pues es consciente de ellos. Un Ser Crístico ha
alcanzado la maestría de su pensamientos-emociones y
de la "Presencia".
-
Un Ser
Crístico no da opiniones, ni consejos a los demás.
No proyecta su historia personal sobre el mundo y
sobre los otros seres. Un Ser Crístico no sana ni
cura a nadie, pues esto no es posible en realidad y
sólo el ego está interesado en curar y cambiar algo
de otros. Un Ser Crístico simplemente "acoge" a los
demás tal como son y les pone delante el ejemplo de
"otra forma de estar". Todo lo demás no es cosa
suya.
-
Un Ser
Crístico vive fuera del juicio de cualquiera o de
cualquier cosa, así como de sí mismo. Al ser
completamente consciente de su naturaleza divina y
de la naturaleza de lo que llamamos "realidad", sabe
que cualquier juicio no es sino una proyección de sí
mismo sobre los demás. De la misma forma, un Ser
Crístico tiene exquisito cuidado en no tomar como
suya ningún juicio u opinión de los demás. Sabe que
todo lo que oye o ve no es sino sus propias
proyecciones y que identificarse con ellas sería
calamitosamente caer en el juicio y la limitación de
sí mismo.
-
Un Ser
Crístico no está interesado en curar el cuerpo. En
curar su cuerpo, ni el cuerpo de nadie. Por lo tanto
no inventa, ni aconseja remedios para curar lo que
no necesita curación. Un Ser Crístico está
interesado en despertar su Conciencia y en ayudar a
que los demás puedan "ver" ese despertar. La
sanación del cuerpo viene como añadidura y es una
consecuencia del principio cuántico rector, que es
la Conciencia. Un Ser Crístico sabe que el cuerpo es
creado por la Conciencia y por lo tanto no
es una causa, sino "un efecto" y actúa así
congruentemente con ello.
-
Un Ser
Crístico sabe que lo que llamamos materia es sólo el
efecto ordenador de la Conciencia, del Observador
cuántico, que es el principio del Ser, del Espíritu,
de Dios, el Principio Rector creando el Universo que
percibimos como material. Un Ser Crístico vive por
lo tanto en un mundo "mágico", fuera de todas las
reglas que el mundo ha inventado y acepta como reales e
ineludibles.
-
Un Ser
Crístico vive fuera del miedo, pues comprende que la
"realidad" no es más que su propia creación y no
puede por menos que bendecirla. Un Ser Crístico
simplemente bendice el mundo y todo lo que le rodea.
No lucha contra nada, pues no existen los enemigos
fuera de él. Un Ser Crístico sabe que cualquier
lucha no es más que una lucha contra él mismo.
-
Un Ser
Crístico vive fuera del tiempo y del espacio. No
pertenece al mundo, aunque está profundamente
presente en él. Un Ser Crístico está más presente en
el mundo que cualquiera, pero su conciencia está más
allá del mundo. Y desde ahí no puede más que
bendecir y vivir regocijándose en el Amor que le
rodea y camina con él.
Queridos
trabajadores de la luz, ya no es el tiempo de seguir
sanando cosas, de seguir sanando la historia personal.
Todo eso ya quedó atrás... Ahora es el tiempo del Poder
(De la Luz, el Amor y el Poder). El Poder del Espíritu
manifestándose a través del canal que tu eres encarnado
en nuestra amada Gaia, la Madre Tierra.
En una siguiente publicación profundizaremos más y
expondremos las herramientas de que disponemos para dar
este paso definitivo que se nos pide ahora que demos.
Queridos
trabajadores de la Luz, no se nos pide ningún
"sacrificio", sólo se nos pide que aceptemos traer ya el
Cielo a la Tierra. No en el mundo, SINO EN TI. El mundo
no tiene que cambiar. Esa es la "gran trampa" de tantos
llamados trabajadores de la luz. No esperes a ver ese
cambio afuera, pues es sólo un cambio en ti. Luego lo
verás afuera. Tu eres el Observador, el Creador
cuántico. Y ahora ya estamos en otra dimensión de la
realidad donde eso funciona de manera cada vez más
inmediata. Y desde ahí podremos compartirlo con muchos
otros seres.
El Cielo
simplemente está ya disponible para que podamos
hacer "download". Al estilo de la nueva energía plasmada
en ese adelanto de la red de redes que se nos regaló y
que los niños (ya mayores) índigo y cristal tan bien han
sabido implementar y materializar sobre la Tierra, ese "download"
es gratis...
Un feliz "réquiem" por el mantra
más repetido por la humanidad en los últimos 10.000 años
y que ahora deja completamente de tener significado. El
mantra del "yo", que rezaba así: "yo, mi, me, conmigo".
En el Amor y el Servicio,
Keshavananda. |